Excursión a Huesca y a Canfranc
El pasado viernes 10 de noviembre el alumnado de 1º Bachillerato (Ciencias) y el alumnado de 2º Bachillerato participó en una salida a Huesca y Canfranc, junto a sus profesores Luis, Jaime y Carmen.
El alumnado que cursa Historia del Arte en 2º Bachillerato se quedó en Huesca. Realizando la visita guiada al casco viejo que ofrece la oficina de turismo, profundizaron, de una manera más práctica, en el arte medieval, tanto románico (San Pedro el Viejo), como gótico (Catedral de Huesca). Dicha visita guiada, sumada a un paseo posterior por el casco antiguo, resultaron de gran utilidad para que los alumnos afianzaran conocimientos y comprendieran un poco mejor el pasado medieval de la ciudad
El resto de alumnado siguió su viaje hasta Canfranc donde se dividieron en dos grupos: por un lado, el alumnado de 2º Bachillerato que cursa Geografía; por otro, el alumnado de 1º y 2º Bachillerato que cursa Física y Química.
Los primeros, que cursan Geografía, permanecieron fuera del laboratorio subterráneo y realizaron una andada por los alrededores de Canfranc. Bajo una fina lluvia descubrieron algunos de los árboles propios de las montañas pirenaicas y también repasaron algunas de sus rocas y de sus relieves más característicos. Os dejamos un par de imágenes a continuación:
Los segundos, alumnado de Ciencias de 1º y 2º Bachillerato, tuvieron la oportunidad de ir a visitar uno de los laboratorios más avanzados de Europa, el Laboratorio Subterráneo de Canfranc, al cual se accede desde el margen derecho del túnel del Somport.
Cuatro de estos alumn@s (Magda Dragomir, Sergio Palacín, Miguel Guillén y Miguel Castilla) nos escriben lo siguiente:
«Fuimos 25 alumn@s l@s que tuvimos la oportunidad de descubrir los secretos que se esconden a 800 metros bajo tierra. Allí, Pipo y Víctor tuvieron la amabilidad de explicarnos los distintos experimentos y la utilidad de este laboratorio, explicaciones a las que los alumnos atendieron muy encarecidamente.
El laboratorio tiene una sede en la superficie, la Cabaña de los Abetos, donde Pipo nos explicó la historia del laboratorio y nos mostró los distintos métodos que usaban antiguamente para la detección de partículas elementales, como la cámara de niebla, donde se podían ver diferentes tipos de radiación.
La parte subterránea del laboratorio está dedicada al estudio del universo y su origen, a través del estudio de partículas elementales que no reaccionan con la materia visible y que nos aportan bastante información sobre el origen del universo. Un ejemplo de ello son neutrinos, una partículas difícilmente detectables formadas en procesos cósmicos muy energéticos como nacimientos de estrellas o explosiones de supernovas, o incluso en el comienzo del universo.
No obstante, en el laboratorio también se estudia el envejecimiento celular en un ambiente de radiación cero, comparándolo con la población que tenían en la superficie de la tierra, de dónde sacaron la conclusión de que tanto el exceso como la falta de radiación produce un envejecimiento celular más acelerado.
La excursión fue una experiencia muy enriquecedora porque hemos aprendido muchas cosas interesantes sobre las que investigan en el laboratorio, además de que ha servido para inspirar a algun@s alumn@s para intentar dedicarse a las diferentes investigaciones que aquí se llevan a cabo.»
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